Sagrado Corazón de Jesús

La expresión «Corazón de Cristo» se refiere al «misterio mismo de Cristo, a la totalidad de su ser, a su persona considerada en su núcleo íntimo y esencial». Directorio sobre piedad popular y liturgia, publicado por la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, # 166

Historia de la devoción al Sagrado Corazón
-P.Jordi Rivero

Referencias al corazón aparecen muy frecuentemente en la Biblia >>> con un rico significado. Jesús mismo nos dice:

Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente. -Mateo 22, 37.

Sin embargo, El sabía que nosotros somos incapaces de amar así por nuestra propia fuerza. Solo el amor divino es capaz de darse plenamente y los hombres. Es por eso que El mismo bajó del cielo, tomo un corazón humano y nos amo hasta el extremo, siendo traspasado por nosotros. Jesus perdona nuestros pecados y restaura nuestro corazón, capacitándolo para vivir en Su amor con su gracia. Contemplando el amor de Jesús, manifestado en su Corazón traspasado, El nos hace capaces del amor divino. ¡Quiere divinizarnos con su amor!

El amor se derramó en el Calvario cuando El Corazón de Jesús fue traspasado. Todos los hombres de todos los tiempos, necesitan contemplarlo y decidir su destino eterno. Ya lo había profetizado Simeón con la Virgen María:

¡y a ti misma una espada te atravesará el alma! – a fin de que queden al descubierto las intenciones de muchos corazones. -Lucas 2,35

Las intenciones de María quedaron al descubierto en la Cruz: Su amor a Jesús pasó la prueba. Pero vemos que son MUY pocos los que aman hasta la cruz. Solo quien se deja traspasar el corazón por amor a Dios adquiere la capacidad de amar como El ama.

La devoción al Corazón de Jesús no es algo meloso. Hay fuerzas muy poderosas de rebelión en nuestro corazón pecador. Hay veces que todo nuestro ser grita de rabia, de odio o de cualquier otra pasión carnal. Estamos ante algo que nos “saca de quicio”. No podemos abrazar la cruz y el mal que rechazamos termina tomando control de nosotros. Esto lo conocen de manera especial los adictos. PERO todos somos adictos en alguna forma. Cuando nos duele, ¡Que dificil es contemplar al Crucificado y dejarse crucificar con SU PODER. Este amor nos exige entrar en el fuego mas perfecto de amor para inmolarnos y sufrirlo todo. Otras veces, al contrario, nuestro corazón está endurecido por sus afanes, sus intereses, sus comodidades… ¡LA TERRIBLE MEDIOCRIDAD DE LOS DEVOTOS!  Hacemos “algo” por EL, pero a nuestra manera, en nuestro tiempo. El es simplemente nuestro “copiloto”.

El mundo desprecia el camino del amor tildándolo de “hacer el papel de tonto”.

En la bodas gusta escoger la lectura de San Pablo a los Corintios:

“La caridad es paciente, es servicial; la caridad no es envidiosa, no es jactanciosa, no se engríe;
es decorosa; no busca su interés; no se irrita; no toma en cuenta el mal;  no se alegra de la injusticia; se alegra con la verdad. Todo lo excusa. Todo lo cree. Todo lo espera. Todo lo soporta”.
-I Corintios 13,4-7

Pero, ¿quien se recuerda?. ¡Queremos que los otros nos amen así!, pero, ¿nosotros?. No. Eso sería “ser tontos”. San Pablo, unos versículos adelante habla de esta “necedad”: “Pues la predicación de la cruz es una necedad para los que se pierden; mas para los que se salvan – para nosotros – es fuerza de Dios. -I Corintios 1,18.  ¿Vemos la razón por la que TODOS los santos abrazan la Cruz?.  SIN ELLA EL AMOR ES UNA FARSA. Solo el amor cristiano llega a los enemigos.

El cristianismo se distingue tanto por la intimidad de amor con Jesús como por su necesario fruto: la obediencia total hasta la cruz.

Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando.

SOLO DIOS
Dios creó todo ser humano para que, desde el vientre de su madre, viva por el amor y sea feliz por el amor. Todos queremos ser comprendidos y valorados. El error es cuando buscamos a las criaturas por encima de Dios. Entonces se nos olvida que SOLO DIOS puede satisfacer el hambre de nuestro corazón. El amor no es un derecho sino un regalo de Dios. Agradecemos el amor de las criaturas pero este solo nos llena si encaja en el lugar que Dios quiere para ese amor. Solo cuando el amor es de entrega, sin interés. Entonces es el mismo amor de Dios.

Solo la religión judeo-cristiana conoce una relación con Dios fundamentada en el amor. Lo que nos enseña el Primer Mandamiento, Jesús lo lleva a la plenitud. Jesús no solo nos pone leyes sino que nos llama a amar muy por encima de toda ley… hasta la locura de la cruz. Esto es lo que significa entrar en su Corazón Traspasado.

UN POCO DE HISTORIA

Los Padres de la Iglesia tomaron la rica Tradición Apostólica sobre el Corazón de Cristo. Comprendían que  Cristo tiene un corazón humano, actúa con corazón humano y nos hace capaces de compartir su amor humano y divino. San Agustín (+430), padre de la Iglesia, aparece frecuentemente en la iconografía con el corazón ardiendo de amor por Dios.

Los Padres meditaron sobre la Ultima Cena, evangelio de San Juan, cuando San Juan se reclinó sobre el pecho de Jesús del que recibió sabiduría divina. San Agustín escribe que Juan bebió de los “secretos sublimes de las profundidades mas íntimas del Corazón de Nuestro Señor”. Otro Padre, SanPaulinus de Nola (+431), escribe que fue así como San Juan recibió sabiduría para escribir la Palabra de Dios.

Los Padres también hacen referencia a las Sagrada Llaga del costado de Jesús, a la Sangre y Agua que brotaron de su corazón, de donde recibimos los sacramentos. San Ambrosio + 397 escribe: “El Agua nos limpia, la Sangre nos redime.” San Juan Crisóstomo (+407) escribe en la misma línea.

Edad Media
En el siglo XII se destaca Guillermo de S. Thierry (+1148) quien enseñaba la importancia de “entrar de lleno en el Corazón de Jesús, en el Santo de los Santos”. Su amigo San Bernardo de Claraval (+1153) enseña que el traspaso del costado del Señor revela Su bondad y la caridad de su Corazón por nosotros. San Victor (+1173) decía que no se puede encontrar dulzura ni ternura que compare a la del Corazón de Jesús.

Santa Clara +1253 saludaba al Sagrado Corazón en el Santísimo Sacramento muchas veces al día.
San Buenaventura +1274, franciscano, doctor de la Iglesia, escribió del Corazón de Jesús como “Fuente Viva>>>.  Jesús nos promete, como a la Samaritana, agua viva. Por eso gritó “Si alguno tiene sed, venga a mí, y beba” -Juan 7,37. Todo cristiano debe convertirse en el pregonero Dios y gritar también como Jesús. Que todos se acerquen a beber la sangre y agua del Corazón de Jesús.

¡Que bueno, que dulce es habitar en Tu Corazón, Oh Jesús! ¿Quien hay que no desearía esta perla? Prefiero darlo todo, todos mis pensamientos, y todos los afectos de mi alma por El, echando mi mente entera en el Corazón de mi buen Jesús. -S. Buenaventura

El himno mas antiguo al Sagrado Corazón que se conserva es “Summi Regis Cor Aveto”. Se cree que es obra de Herman Joseph (+1241), norbertino de Colonia, Alemania.

Los cartujos fueron los primeros monjes devotos al Sagrado Corazón. Ludolf de Sajona (+ 1378), escribió: “El Corazón de Jesús fue herido de amor por nosotros, para que, respondiendo a su amor, podamos entrar por esa herida abierta a Su Corazón y allí ser inflamados con Su amor, tal como el hierro puesto al fuego se hace incandescente.” El cartujo Lansperguis +1539 es la primera persona conocida por recomendar a la gente el tener la imagen del Sagrado Corazón en un lugar visible para venerarla e inspirar al alma.